El pensamiento 2×2 permite examinar situaciones complejas mediante el uso de una matriz que representa un conjunto de conflictos de intereses. En vez de buscar una única solución, los procesos 2×2 permiten entender la situación, ganar perspectiva y enfoque. De este modo, la tensión se vuelve positiva porque comporta asuntos e interrogantes importantes. Asimismo, surgen objetivos conflictivos, lo que nos permitirá establecer los parámetros de la investigación. Y, dado que los argumentos fuertes y débiles de los dos objetivos en conflicto (ejes) son considerados, en vez de una única solución, surge un conjunto de opciones.